Performance surgida en 2015, durante una residencia realizada por Rosa Apablaza en FLORA Ars & Natura, Bogotá, Colombia, en base a observaciones que realizó la artista en la ciudad, donde vió reiteradamente un estereotipo de mujer vestida completamente de mezclilla. A partir de estas observaciones surgió la siguiente reflexión: el “entero de jeans levanta cola” es una tendencia feminista con origen en Colombia, masiva y radical que vincula moda y política.
El jeans fue una prenda diseñada en el siglo XIX por Levi Strauss con el sastre Jacob Davis para los trabajadores de las minas de oro, durante la época de la fiebre del oro en el Oeste de Estados Unidos.
Cuando comenzó la Segunda Guerra Mundial los jeans dejaron de ser una prenda exclusiva de los trabajadores y se amplió al uso masivo. En los 60 y 70 la prenda se convirtió en un arma en el proceso de igualdad, y cuando mujeres empezaron a usarlos, la tendencia no fue socialmente “muy aceptada”.
Mujeres colombianas adoptaron los jeans a partir de una apropiación postfeminista, de la cual más adelante, surgieron los famosos jeans “levanta cola” y luego una versión más sofisticada: el “enterito levanta cola”. A partir de observaciones de Rosa en la ciudad, la artista llegó a la conclusión de que esta estética está relacionada con el conflicto del nark0tr4fiko en el país, mediante la ostentación que ejercen hombres sobre “su” mujer como un trofeo.
Además, esta estética representa el anhelo de muchas adolescentes e incluso familias que invierten en el “enchulamiento” de las niñas (mediante cirugías, vestuarios, etc.) como una inversión que se convertiría en la posibilidad de un ascenso económico a partir de su vinculación matrimonial con un N4rk0, siendo uno de los más famosos de Colombia conocido como “El Patrón”.
Además, la cantidad de aplicaciones (tachas, brillos, etc.) utilizadas en el vestuario, que resaltan ciertas partes del cuerpo, corresponden a ensamblajes que aluden a aspectos identitarios, por ejemplo, la relación que originalmnete tenían los jeans de ser una prenda de vestir usada por mineros que extraían oro y situaciones históricas relacionadas al extractivismo del oro que existió en Colombia. El famoso “Bling Bling” muy utilizado por Latinxs viviendo en Estados Unidos como una forma de ostentación de riqueza y de haber alcanzado el “Sueño Americano”.
Al regreso de Rosa a Chile, convocó a un grupo de amigas y artistas de performance para realizar esta acción de forma colectiva dentro de la exposición “Crónicas de lo ajeno” en Galería Gabriela Mistral en 2016, exposición colectiva donde se exhibieron las propuestas de los siguientes artistas residentes de FLORA: Rosa Apablaza, Valentina Soto, Alejandro Leonhardt e Ignacio Gatica. La curatoría de la exposición estuvo a cargo de la curadora argentina Pamela DesJardins y la directora de Galería Gabriela Mistral en ese entonces era Florencia Loewenthal. La residencia realizada por Rosa Apablaza fue a partir de una beca otorgada entre un vínculo entre FLORA Ars & Natura (dirigida por el curador colombiano José Roca) y la Galería Gabriela Mistral, beca financiada por el CNCA del gobierno de Chile.
En esta performance participaron: Inés Bascuñán, Jocelyn Muñoz, Gabriela Rivera, Cheril Linett, Rocío Fernández, Rosa Apablaza, Paula Baeza Pailamilla y Luna Acosta.Al regreso de Rosa a Chile, convocó a un grupo de amigas y artistas de performance para realizar esta acción de forma colectiva dentro de la exposición “Crónicas de lo ajeno” en Galería Gabriela Mistral en 2016, exposición colectiva donde se exhibieron las propuestas de los siguientes artistas residentes de FLORA: Rosa Apablaza, Valentina Soto, Alejandro Leonhardt e Ignacio Gatica. La curatoría de la exposición estuvo a cargo de la curadora argentina Pamela DesJardins y la directora de Galería Gabriela Mistral en ese entonces era Florencia Loewenthal. La residencia realizada por Rosa Apablaza que a partir de una beca otorgada entre un vínculo entre FLORA Ars & Natura (dirigida por el curador colombiano José Roca) y la Galería Gabriela Mistral, beca financiada por el CNCA del gobierno de Chile. En esta performance participaron: Inés Bascuñán, Jocelyn Muñoz, Gabriela Rivera, Cheril Linett, Rocío Fernández, Rosa Apablaza, Paula Baeza Pailamilla y Luna Acosta
